Alexei Nápoles González

La historia del boxeo cubano recoge a varios exponentes que demostraron ser verdaderos ases del pugilismo mundial y que fueron capaces de convertirse en las primeras figuras del deporte de los puños en el planeta. Uno de ellos fue precisamente el habanero Eligio Sardiñas Montalvo, más conocido como Kid Chocolate quien obtuvo dos fajas mundiales una en el ligero junior en 1931 y otra en el peso gallo en 1932

Cuentan los historiadores que Kid Chocolate solía pronunciar la frase “El boxeo soy yo”, y que su interés por esta disciplina despertó observando los combates de la Arena Colón, donde conoció los primeros secretos del arte del golpeo y la esquiva. El astro nació el 28 de octubre del año 1910 en la calle de Santa Catalina en el barrio de El Cerro, ubicado en la capital de todos los cubanos.

Sin embargo, fue a los 12 años que este joven, corto de piernas y brazos pero de ágiles movimientos, subió por primera vez al encerado. Unos años después derrotó por puntos en seis asaltos a Johnny Cruz, conocido como El elegante del Ring, durante un torneo semiprofesional desarrollado en el Nuevo Frontón. Mientras la segunda pelea entre ellos dos no ratón del quinto round pues Kid lo noqueó en el cuadrilátero de la misma instalación deportiva.

Con 18 años partió a Nueva York de la mano del entrenador Luis Pincho Gutiérrez y un año más tarde rompió el record de taquilla en su consagratorio triunfo ante Al Singer, el llamado “Rey de los Judios”. Por esa victoria y las conseguidas frente a Joel Scalfaro y Fidel La Barba su nombre comenzó a ganar popularidad y gran admiración entre los neoyorquinos.

Eligio sufrió su primera derrota en el ámbito del Jackie Kid Bergprofesionalismo en la pelea contra el contendiente de Inglaterra Jackie Kid Berg, quien con 21 años acumulaba 86 triunfos, 5 reveses y cuatro empates. En la pesa Berg marcó 135 libras mientras el cubano estaba en desventaja al hacer 123.

Sobre ello los periodistas deportivos cubanos Irene Forbes y Juan Velásquez cuentan en su libro Elegidos por la Gloria “Que a pesar del descalabro de Chocolate este boxeador logró lo que solo antes habían alcanzado el artista Rodolfo Valentino, el aviador Charles Lindberght, el jonronero Babe Ruth, y el alcalde de Nueva York Mickey Walter: Parar el tráfico en la concurrida arteria de Broadway y 47, donde el policía de tránsito corrió a pedirle un autógrafo, y tras el agente se lanzaron peatones y conductores”.

Llegaron entonces las buenas noticias para el talentoso pugilista de la Mayor de las Antillas, cuando el 15 de julio de 1931 logra el título de campeón mundial ligero junior tras vencer por nocaut en el pleito final a Benny Bass. En ese mismo año solo perdió con Tony Canzoneri en un espectacular combate disfrutado por cerca de 20000 espectadores.

En 1932 participó escaló en siete ocasiones el encerado y entre ellas la más importante resultó el de la victoria ante Lew Feldman el 13 de octubre la cual le propició obtener el cetro el orbe en la división gallo.

Por las ciudades europeas de Madrid Barcelona y París realizó una excelente actuación tras ganar todos sus combates aunque su carrera sufrió un severo retroceso al ser derrotado el 24 de noviembre en el segundo asalto por Tony Canzoneri al volver a Estados Unidos.

El sol no siempre brilló para Chocolate pues padecía de una peligrosa enfermedad, a pesar de ello entre los años 1934 y 1938 se impuso en 47 de 50 combates llegando a sumar en toda su vida boxística 136 éxitos, de ellos 51 nocauts, con 6 empates y 10 derrotas. “Ojo”, únicamente lo pusieron fuera de combate dos adversarios.

Chocolate siempre admirado por todos murió a la edad de 77 años en las primeras horas de la madrugada del 8 de agosto de 1988 a causa de cirrosis hepática.